Según publica hoy Cinco Días, se avecinan nuevos movimientos en torno a la NEBA, la nueva oferta mayorista de acceso indirecto en la banda ancha. En un comunicado, la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) ha explicado que ha propuesto revisar a la baja los precios provisionales de esta oferta, que está en funcionamiento desde el pasado mes de julio.
La CMT ha indicado que con NEBA los operadores pagarán a Telefónica una cuota por el acceso a su red en función de si es la red de cobre o la de fibra óptica. En el caso de la fibra abonarán una cuota mensual de 20 euros mientras que en cobre abonarán 6,50 euros al mes. “Mientras que la cuota mensual en cobre quedaría igual que hasta ahora, la de acceso naked bajaría un 3% hasta 15,10 euros al mes y la de fibra se reduciría en un 14%”, ha indicado la CMT.
Según el regulador, además de esta cuota mensual fija independiente de la velocidad nominal, los operadores contratarán un determinado caudal o ancho de banda a Telefónica, acorde con las necesidades que prevean afrontar en función de las ofertas que vayan a lanzar al mercado y la demanda potencial del conjunto de sus usuarios en una zona determinada. Así, habrá tres niveles diferentes de servicio: Best Effort, utilizado para el acceso a Internet por los usuarios residenciales, con una cuota mensual de 21,82 euros; Oro, destinado al sector empresarial, asegurando mayor calidad de servicio, con una cuota de 25,09 euros; y Real Time, para servicios de telefonía IP, por 28,37 euros mensuales. Aquí, según ha explicado la CMT, la reducción de precios es muy significativa, ya que, en la medida cautelar aprobada en julio de 2012, por ejemplo, la cuota mensual en Best Effort era de 32,62 euros, es decir que el descenso es del 33%.
El regulador ha indicado que estas nuevas cifras se presentan ahora a consulta pública para que los operadores puedan expresar su punto de vista, antes de ser enviados a la Comisión Europea y aprobados finalmente. Según la CMT, la medida tiene como objetivo promover la competencia en banda ancha, permitiendo a los operadores alternativos realizar ofertas más competitivas, a la vez que incentivar la inversión en redes de nueva generación.