IBM ha hecho públicos los resultados de su estudio CISO-Chief Information Security Officer, que es su primer informe sobre la situación de los responsables de seguridad de las empresas. La firma ha realizado más de 130 entrevistas a altos directivos relacionados con la seguridad en todo el mundo. Una de las conclusiones más destacadas es que el 25% de los encuestados reconoce que su papel en las organizaciones es cada vez más importante, ya que asumen muchas más responsabilidades a la hora de diseñar la estrategia de negocio, dejando atrás ese enfoque puramente tecnológico que tradicionalmente han desempeñado estos trabajadores.
El estudio también ha clasificado a los responsables de seguridad en tres categorías según su preparación. En primer lugar, los influenciadores, que representan un 25% de los entrevistados y que son los que influyen en la toma de decisiones dentro de una compañía, además, son los mejor preparados y suelen tener más experiencia que el resto. Las otras dos categorías se dividen entre losprotectores y los que dan respuestas.
La presión va en aumento para aquellos que velan por la seguridad. El incremento en el número de ataques y vulnerabilidades preocupan en las empresas. Más del 50% de los participantes en el estudio citaron la seguridad móvil como uno de los retos principales en los próximos dos años, por ello, un 66% espera un incremento en los presupuestos destinados a la prevención. El objetivo es anticiparse a los posibles ataques, estar en guardia para que no pillen por sorpresa.
IBM, en base a las conclusiones obtenidas en el estudio, señala que los influenciadores, los responsables más preparados, perciben la seguridad como imperativo en el negocio. De hecho, el 60% de las empresas más avanzadas la consideran un tema clave en las reuniones. Hay compañías que forman comités de riesgos para responder a los desafíos que se puedan presentar, concretamente el 68% de las más importantes. Asimismo, los influenciadores se ocupan de tomar decisiones basadas en datos y mediciones. Por último, se erigen como responsables, junto al equipo directivo, a la hora de idear los presupuestos para seguridad. El 71% de las organizaciones más destacadas poseen presupuestos específicos para seguridad.
