La presente operación supondría, a juicio del TDC, el control por parte de Telefónica de España de uno de los tres operadores independientes que obtuvieron licencias de acceso radio en el año 2000, concurso en el que se excluyó a la operadora.
De llevarse a cabo la misma, Telefónica accedería a través de Iberbanda, participada por el Grupo Prisa y El Corte Inglés, a la tecnología LMDS, que presenta una serie de ventajas, fundamentalmente para el acceso a banda ancha en las zonas rurales y para el desarrollo futuro de la tecnología WiMAX. Además, la operadora presidida por Luis Lada adquiriría la cartera de clientes del negocio urbano de Iberbanda, en el que la cuota de mercado de la primera es, a juicio del TDC, “especialmente elevada”.
Aunque el dictamen cursado al Gobierno no es vinculante, fuentes ministeriales han explicado que el Ejecutivo tendría que argumentar la toma de una decisión contraria a la recomendación del TDC.
Por su parte, Telefónica ha rechazado evaluar la recomendación TDC, si bien ha subrayado que la decisión definitiva sobre la operación la ha de tomar el Consejo de Ministros.
