Las compañías asentadas en Europa emplean cada vez con mayor asiduidad Internet como un medio económico de ampliar el alcance de aplicaciones empresariales críticas basadas en la web y que son utilizadas por usuarios caracterizados por su gran dispersión geográfica, como son la gestión de contenidos, gestión de la cadena de suministro, gestión de las relaciones con los clientes o la automatización de la fuerza de ventas.
Así los revela un estudio realizado por Quocirca y encargado por Akamai analiza la efectividad y uso de aplicaciones basadas en la web por empresas de varios países europeos.
El estudio también señala que el 58 por ciento de los encuestados esperan tiempos de respuesta de menos de tres segundos y un 90 por ciento de menos de cinco segundos, además de incidir en que el 80 por ciento de los encuestados cuenta con una disponibilidad de Internet de más del 99 por ciento.
Una de las conclusiones que se puede extraer del estudio es que Internet no fue diseñada para ser utilizada como plataforma empresarial, de modo que no satisface eficazmente las demandas referentes a acceso fiable y rápido a aplicaciones empresariales de los usuarios. Sin embargo esto no implica que las empresas no confíen en que este aspecto cambiará, muy al contrario, las compañías europeas incrementan cada vez más su compromiso con las aplicaciones basadas en la web como manera de distribuir aplicaciones empresariales, de hecho, un 42 por ciento de las organizaciones contactadas para el estudio ya han desplegado aplicaciones basadas en web.
