Por Juan Ignacio Cabrera A pesar de los malos agüeros, el mercado del PC sigue avanzando a buen ritmo, por lo menos en cuanto a venta de unidades se refiere, porque el escenario es mucho más gris si se atiende a la facturación como resultado de las continuas bajadas de precio. Entre enero y marzo se comercializaron en España, según los datos preliminares de IDC, 1.343.784 ordenadores personales, un 21,6% más que en el mismo periodo de 2007. Como novedad, Acer extiende su dominio en portátiles al global del mercado y supera por primera vez a HP. La razón está en que, además de seguir avanzando a un ritmo endiablado, la firma asiática suma en las estadísticas por primera vez las ventas de Packard Bell, compañía que compró el año pasado. En concreto, Acer vendió 363.866 máquinas, un 64,3% más, mientras que HP se quedó en 342.901, con un 43,2% de crecimiento. En tercera posición se situó Dell, con 110.400 PC, aunque la firma estadounidense cayó casi un punto con respecto a 2007. Le siguieron Fujitsu Siemens, que experimentó un notable ascenso del 49,5% y vendió 76.918 sistemas personales, y Toshiba, que sólo aumentó un 16,4% y rozó las 76.000 unidades. La sexta posición del ranking de IDC fue para la primera firma española, Airis, que vendió prácticamente los mismos equipos que el año anterior (exactamente 42.562). Remontada de Apple La lista de los diez primeros la completan Sony, Apple y Asus, dos grandes multinacionales que vienen remontando puestos y que han vendido más 30.000 unidades. El “efecto halo” del iPod, que en otros mercado ha movido hacia arriba la venta de sistemas de la manzana, también empieza a notarse en España. Sorprende, por otro lado, las escasas 28.150 unidades que fue capaz de poner en el mercado Lenovo, una compañía que a escala mundial compite por la tercera posición del mercado con Acer. También es reseñable la cada vez menor participación en la tarta de la informática personal del capítulo de “otros”, que bajó un 25,4%. Y es que en este colectivo de compañías, que sólo vendió 201.285 unidades, dominan los fabricantes locales, que están viendo como sus ventas, básicamente de sobremesas, menguan cada trimestre y que, en algunos casos (como el de Cofimán), empiezan a sufrir los efectos del parón económico.
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