Por Ariadna González Ortiz
Metro de Madrid presta un servicio imprescindible y de índole crítica a la Comunidad. Para garantizar el mismo y minimizar el impacto de eventuales catástrofes naturales o atentados, se ha dotado de fibra externa entre sus principales nodos de explotación de negocio: Alto del Arenal, Puerta del Sur, Depósito de Canillejas y Campo de las Naciones.
El proyecto iluminará la fibra entre estos recintos, dotándola de la infraestructura de red de transporte capaz de garantizar la continuidad del servicio en caso de contingencias.
En una primera fase, Metro ha reforzado su infraestructura de comunicaciones para dotar a Alto del Arenal y Puerta del Sur de enlaces de comunicación redundantes y de alta capacidad, tanto por los túneles del sistema, como exteriormente a través de enlaces alquilados a Iberdrola.
Al respecto, Enrique Pérez Amorós, gerente de Proyectos de Telecomunicaciones, Señales y Control de Metro de Madrid, indicó que “después de hacer un arduo estudio de la situación, ver entre las opciones de tecnología existente y los candidatos que optaban por ser sus proveedores, la elección fue clara: Transmode
que cumplía con todos los requerimientos hechos”.
Esta empresa fabricante de soluciones de networking óptico para el transporte de tráfico de voz, datos y vídeo, basado en tecnología WDM (Wavelength Division Multiplexing) cuenta, además, con experiencia en otros metros del mundo.
Metro de Madrid sacó a concurso público un proyecto para interconectar sus principales nodos de explotación de negocio.
La primera fase proveerá del enlace de comunicaciones redundante y de alta capacidad. Entre ambas ubicaciones se transportan ciertos servicios de comunicaciones sobre los que se apoyan los sistemas y las aplicaciones para dar servicios finales de usuario.
La solución tecnológica de Transmode, resultó ganadora por disponer de la mejor relación entre fiabilidad, prestaciones y precio de mercado. Como aval también tienen al ya reconocido integrador Indra que, como partner certificado, ha coordinado el proyecto.
Miles de kilómetros de fibra, millones de euros y un capital humano también cuantioso trabajan bajo la ciudad y enlazan los centros de control que en esta fase del proyecto cuenta con una solución consistente en una solución de dos bastidores en configuración redundada, en los que se encuentran duplicados todos los elementos funcionales (fuentes, transpondedores, filtros, etc).
Cada servicio (SDH STM-1, Gigabit Ethernet y 10G , PDH E1, FiberChannel 4G y ATM STM-1) es introducido en el sistema de comunicaciones, encapsulados en lambdas de 10G y genera la señal de protección que, conjuntamente con la señal principal, es transportada sobre la fibra hasta el otro nodo. Es decir, hay un espejo idéntico en control para que en caso de que falle uno, el otro funcione en milésimas de segundos.
Cabe remarcar que la solución de Transmode se ha optimizado de manera que no sea necesaria la inserción de elementos activos en el trazado de fibra, como serian etapas de amplificación, regeneración, filtros de compensación de distorsión cromática, de fase, etc., que dificultarían el mantenimiento y la evolución futura de la red. Porque, según explica Pérez Amorós, para ellos es más fácil y más barato instalar fibra óptica que multiplexarla. La vida de la fibra es duradera y amortizable en el tiempo.
MITIGAR RIESGOS
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