La carga inalámbrica de dispositivos móviles tiene un prometedor futuro a la vista. Según un reciente estudio de Juniper Research, la adopción de esta tecnología aumentará con gran velocidad en los próximos años: en 2020 casi el 40% de los hogares estadounidenses, y más del 20% si hablamos de Europa, utilizarán el sistema inalámbrico como alternativa al cable.
La investigación Wireless Charging: Opportunities, Applications & Standards 2015-2020 pone de manifiesto cómo la tecnología inalámbrica puede servir de trampolín para muchos servicios de datos, así como para un suministro más cómodo y práctico de la energía de todos los gadgets que nos rodean. Sin embargo, los recelos del consumidor acerca de la eficacia de esta fórmula respecto a la carga por cable, hacen que el interés por la misma a corto plazo sea todavía bajo.
No obstante, actualmente cada vez más dispositivos implementan está opción (es el caso de los smartphones, tablets, warables y muy pronto lo será también de los portátiles), lo que indica que los proveedores de infraestructura empiezan a mostrar su apoyo a este sistema, de manera similar a como lo han hecho con el Wi-Fi público o gratuito. De esta manera, el estudio de Juniper Research señala que precisamente esta presencia visible de la infraestructura tendrá un papel clave en la sensibilización de la tecnología, permitiendo probarla sin comprometerse a su compra.
Por otra parte, la investigación señala que una de las áreas con mayor potencial de esta tecnología en los próximos años será la prestación de servicios basados en datos adicionales. Es decir, junto a la carga propiamente dicha, y todo el atractivo que ello tiene, se perfila como un gran punto de interés del wireless charging la posibilidad de intercambiar datos de forma sencilla lo que permitirá desarrollar una variedad de servicios over-the-air a través de los puntos de recarga.
“La carga inalámbrica será en última instancia algo más que el poder y la velocidad de carga”, recalcó el autor de la investigación James Moar. “La capacidad de identificar la ubicación del dispositivo a través del intercambio de datos permite todo tipo de funciones basadas ??en localización tanto en el hogar, el coche y en la industria del ocio. Las partes interesadas de la industria deben estar preparados para aprovechar esta capacidad”.
Otros hallazgos del estudio hacen mención a que con la aprobación regulatoria, Japón liderará la adopción de tecnologías basadas en carga a larga distancia. En otros mercados, la carga basada en inducción seguirá predominando en los próximos 5 años.
Finalmente, destacar que una quinta parte de todos los dispositivos portátiles incorporará carga inalámbrica en 2020. Esto tendrá un gran impacto en el diseño de los equipos, permitiendo diferentes modelos sin conectores físicos.