Aunque la presentación de otoño de Apple en San Francisco tuvo ayer muchos protagonistas (el nuevo iPad Pro y o la versión renovada del sistema operativo con el iOS 9), las estrellas volvieron a ser los iPhones, el producto que más ingresos (alrededor de un 60%) y notoriedad sigue reportando a la compañía que dirige Tim Cook.
En concreto, Apple renovó sus dos teléfonos de gama alta con los nuevos iPhone 6s y iPhone 6s Plus. La gran novedad es que incorporan una pantalla sensible a la presión. Y es que la interfaz incorpora 3D Touch, que permite discriminar menús en función de la presión de los dedos. Además, los iPhone 6s y iPhone 6s Plus incluyen pantallas Retina HD hechas de un vidrio muy resistente y está recubierto de un aluminio serie 7000, la misma aleación que presenta el Apple Watch y que se usa en la industria aeroespacial.
Los nuevos móviles, que llevan el mismo diseño que sus predecesores, también incluyen el nuevo chip A9 diseñado por Apple. En cuanto a cámaras, mejoran la trasera (ahora de 12 megapíxeles y capaz de grabar vídeos en 4K). Mientras tanto, la delantera es de 5 megapíxeles.
Los nuevos teléfonos saldrán a la venta el próximo 25 de septiembre, aunque se podrán reservar desde el 12. En España, habrá que esperar a finales de año para verlos. El precio de partida para el modelo de 16 GB será de 649 dólares (en el caso del 6S) y de 749 dólares (para el 6S Plus). Mientras tanto, la versión más cara alcanzará los 949 dólares.