Degussa, especialista en el comercio de oro físico de inversión y otros metales preciosos, calcula que los teléfonos móviles que existen en España pueden contener un valor en oro de alrededor de 100 millones de euros.
Los datos los ha obtenido partiendo de que, según Statista, hay unos 55 millones de líneas móviles. Si tenemos en cuenta que, en general, cada línea se corresponde con un dispositivo (es cierto que existe la posibilidad de tener una línea en dos dispositivos o varias líneas en un dispositivo, pero no es lo habitual) y que la cantidad de oro que contiene cada uno es de unos 0,036 gramos, todos los móviles del país contendrían 1.980 kilos de oro, que multiplicados por los alrededor de 50.000 euros que vale un kilo del metal precioso (su precio varía dado que cotiza casi las 24 horas de lunes a viernes) da como resultado 99 millones de euros. Lo que supone que el valor del oro de cada aparato sería de aproximadamente 1,8 euros.
Si esta operación la realizamos a nivel mundial, la cifra que obtenemos es bastante considerable, unos 12.600 millones de euros, ya que, según una agencia de la ONU, la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), hay alrededor de 7.000 millones de móviles, que son portadores de 252.000 kilos de oro. Investigaciones realizadas por la Universidad de Naciones Unidas y la Iniciativa Global de Sostenibilidad Electrónica hace ya casi una década concluían que de una tonelada de teléfonos móviles se podrían llegar a obtener unos 300 gramos de este metal precioso, “una cifra considerable”, en opinión de Tomás Epeldegui, director de Degussa en España, que señala que “la minería solo consigue una media de cinco gramos por cada mil kilos de material extraído”.
Por otra parte, el último Monitor Global de Basura Electrónica elaborado por la UIT, de 2020, detalla que en 2019 se desecharon oro, plata, cobre, platino y otros materiales recuperables con un valor estimado en unos 50.800 millones de euros.
En torno al 90% del oro reciclado procede de la joyería y el 10% restante de la basura electrónica
“Como cada año se desechan toneladas de móviles y otros dispositivos, la ‘minería electrónica’ se ha convertido en una importante fuente de obtención de oro, teniendo en cuenta que una tercera parte de la demanda mundial de este metal precioso se cubre con el reciclado”, comenta Epeldegui. Concretamente, según los datos del Consejo Mundial del Oro, en torno al 90% del metal precioso reciclado procede de la joyería y el 10% restante de la basura electrónica. “Este es el motivo por el que una parte importante de la actividad de compañías como Degussa es la recompra de piezas de oro, que se reciclan y se transforman en lingotes y monedas”, añade.
El director de esta empresa en España advierte, además, que es muy importante que quienes quieran vender objetos de oro acudan “a compañías acreditadas para poder obtener un precio justo por los mismos”.