Una nueva generación de sensores inteligentes y autónomos revolucionará el IoT

Internet de las Cosas está impulsando el desarrollo de servicios avanzados para procesar la información en tiempo real, lo que requiere disponer de grandes volúmenes de almacenamiento, de mayor potencia computacional, y de sensores más inteligentes y autónomos.

Publicado el 01 Sep 2017

38046_52

El IoT Solutions World Congress, IoTSWC 2017, identifica algunas claves que están marcando la adopción de una nueva generación de sensores que se fusionan con microprocesadores y que producirán a corto plazo un enorme salto cualitativo en el ecosistema IoT.

Eficiencia y seguridad

Los científicos Jesús Pacheco y Salim Hariri, miembros del National Science Foundation Center for Cloud and Autonomic Computing de la Universidad de Arizona (EE.UU.), defienden el incremento de la eficacia de los sensores a través de la integración de IoT con metodologías fog y cloud. “En todas las aplicaciones que se desarrollan para IoT, los sensores constituyen el elemento indispensable para trasladar el mundo físico al mundo digital, un proceso que se ve beneficiado por la integración de fog computing”. Para Pacheco y Hariri, un circuito de IoT basado en fog y cloudno sólo proporciona el potencial de procesamiento que requieren dichos entornos sino que, además, es capaz de construir un nuevo ecosistema de servicios accesibles y de coste efectivo.

Anatomía del sensor inteligente

Majeed Ahmad, autor de ‘IoT and the Evolution of Smart Sensors’, explica que se abre una puerta para la optimización de la eficiencia en el procesamiento y la recogida de los datos en infraestructuras IoT con la llegada de MCU, que vendría a ser la simbiosis entre un sensor y un microprocesador, realizando funciones autónomas de calibración y diagnosis. Esta fusión entre el sensor y las funciones de procesamiento de la señal están redefiniendo el panorama de los sensores, que tradicionalmente había estado relegado a elementos discretos como termopares y acelerómetros.

Este tipo de sensores toman decisiones con respecto a qué datos procesar de manera local y qué otros se han de remitir a la nube a través de la infraestructura IoT. Los sensores inteligentes crean condiciones límite sin la intervención de un operador humano, y sus aplicaciones pueden analizar los datos de manera local, emprender acciones, o emitir alarmas a través de cloud al usuario en forma de email, mensaje de texto o notificación a través de la app.

Gran potencial de crecimiento

Por su parte el vicepresidente y socio de la consultora Gartner Research, David Cearley, destaca la inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje automático (ML), que incluyen tecnologías de aprendizaje profundo, redes neuronales y procesamiento del lenguaje natural, como los elementos que acompañarán a las plataformas más avanzadas, “Se incluirán sensores que tendrán capacidades de comprensión, aprendizaje, predicción, adaptación y potencial para operar de manera autónoma”.

¿Qué te ha parecido este artículo?

Tu opinión es importante para nosotros.

C
Redacción Computing

Artículos relacionados

Artículo 1 de 4