En 2023 se alcanzarán 416,5 millones de conexiones M2M, así lo indica un informe de ABI Research. Para diferenciarse en este terreno, los operadores de red europeos deberán recurrir a nuevos modelos de negocio y tecnologías LPWA cada vez más competitivas para mantener y aumentar su cuota de mercado existente.
“Si bien las conexiones celulares LPWA como NB-IoT y LTE-M conformarán la mayor parte de las conexiones M2M en Europa en 2023, los operadores tendrán que hacer frente a una mayor competencia de tecnologías no móviles como SigFox y LoRa“, señala Ryan Harbison, analista de investigación de ABI Research. “Al centrarse en la definición de casos de uso y proporcionar soluciones de valor agregado que vayan más allá de la conectividad, los telco pueden lanzar ofertas diferenciadas en sus respectivos mercados nacionales e internacionales. En el futuro, los carriers europeos no sólo necesitan conocer su negocio, sino que también el de su cliente objetivo para descubrir las oportunidades de esta industria”.
Además, los operadores de redes deben entender que el mercado europeo también está fuertemente influenciado por las iniciativas y regulaciones de la Unión Europea. De los 86,0 millones de dispositivos M2M conectados a redes móviles a finales de 2017, el 67,4% estaban relacionados con telemática y otras aplicaciones de transporte, en parte debido a la iniciativa eCall de la UE. Del mismo modo, el 22% de las conexiones totales tuvo que ver con el despliegue de smart cities y otras industrias de infraestructura, en parte debido al grupo comunitario Smart Grids Task Force orientando a estimular la implementación y el desarrollo de energía inteligente. Compañías como Orange, Deutsche Telekom y Vodafone que han implementado redes NB-IoT lo han hecho porque las conexiones dentro de estas categorías verticales más grandes se ajustan al caso de uso de NB-IoT de transmisión de pequeñas cantidades de datos con poca frecuencia.
“Los operadores europeos se están dando cuenta en gran medida de que la conectividad es el mínimo común denominador y están cambiando su enfoque de valor a largo plazo que estas conexiones generan”, concluye Harbison. “La estrategia M2M de Vodafone se centra en poner más énfasis en sus propios servicios en la nube que solo en el componente de conectividad, mientras que Deutsche Telekom y Orange han abierto laboratorios IoT para desarrollar y probar prototipos de aplicaciones específicas de Internet de las Cosas. Al centrarse en estas nuevas tecnologías y oportunidades de mercado, los operadores de red europeos pueden maximizar el valor que proporcionan sus conexiones y soluciones “.